Ahora que esta tan de moda el flúor me gustaría hacer un
pequeño recordatorio y porque no, un homenaje (uno de tantos miles) al estilo Audrey
Hepburn y de rebote a la firma Givenchy.
No tengo nada contra la moda actual, de hecho nadie que me
vea vestida de diario adivinaría que tengo dos estanterías de la mítica actriz
pero yo siempre había categorizado el amarillo fluorescente servia para subrayar
lo importante, el verde para lo un poco menos importante y el rosa luminoso…
para hacer florecillas en borde del texto y no puedo evitar pensar cuando veo
alguna chica vestida con estos colores que se ve o se siente importante, menos importante
o florecilla.
De hecho este hecho fosforito no lo crítico, de hecho lo
admiro, tienes que estar muy a gusto con tu vida, con tu cuerpo o con ambos
para llevar esos colores.
Es totalmente innegable que en épocas de verano/ primavera
se llevan colores vivos y alegres, en invierno/otoño se utilizan colores más fríos
y sobrio, y añadiendo a esto la época personal de la vida de cada uno y el
humor de cada individuo llevamos unos colores u otros. Te aseguro que a mi me echan
del trabajo por causa injusta y al día siguiente no me pongo fluor a no ser que
me quiera hacer la importante y denunciar la penosa situación. Así que pensándolo
bien en el cole no iba tan equivocada en mi clasificación de los fluor.
Dicho esto, reitero
mi aplauso a estas personas que llevan estos luminosos colores dando consejo
que la línea sobria, lisa, elegante, marcando sutilmente el cuerpo de la mujer que
lucia Audrey siempre, este en el fondo de armario como seguro de moda.